martes, 11 de septiembre de 2012

Postal de Vacaciones.


Jachuspa dijo:
Les envío una postal de vacaciones:
Hace muchísimo calor en Cartagena, no mueve ni una gota de aire; doy la vueltas en la cama una y otra vez, pero no consigo dormir; además, el Ipod se ha quedado sin pila y esto sí que jode; tengo que buscar en la mesilla el cargador o si no, medio Orfidal. Al quitarme los auriculares, me incorporo agarrando con mi mano derecha el cabecero de la cama, a la altura de la señal que hice en 2003 y que indica hasta donde llegó el sudor ese año.
Desde este microcosmos sorprendente que es el patio de vecindad llega al dormitorio un ruido estruendoso y descacharrante; sobresaltado, mi mujer me tranquiliza diciendo que es la lavadora del vecino de arriba; a mí no me lo parece. Es un tío raro el vecino del cuarto y, conociéndole, lo más probable es que pueda tener instalado en su casa un acelerador de protones. Dicen de él que en las noches de luna llena cocina leucocitos. Sospecho que debe de hacer extraños y terribles experimentos pues, para disimular su alopecia, se ha comprado una peluca y a los cuatro días le han salido canas.
La ventana está abierta de par en par. ¡Qué poco ruido quitan las mosquiteras!, a través de ella se filtra la luz que viene del patio y de los ascensores. Esta madrugada se han puesto todos de acuerdo en apagarlas y encenderlas a la vez; parece estén conectadas a un estroboscopio. De repente, un enorme eructo sacude el tedio; con la satisfacción del deber cumplido, su autor se asoma a la ventana, gritando para que le oiga todo el mundo: “ ¡Así empezó Tom Jones!”. Debe de estar entrenando para Operación Triunfo.
A algunos les va mal con la Play y se pasan a la música en vivo: cuelgan de una cuerda un radiocasette y lo hacen descender por el interior del patio: con una precisión matemática, el loro se detiene, justo, en el hueco de cada ventana abierta; con suerte, no te toca el regatón.
Las conversaciones, algunas lejanas, que puedo escuchar tienen que ver con la crisis y con una furcia de reciente avecindamiento en esta comunidad. Comentan, por lo bajini, que la pelandusca trabajaba en un cuquiclub de la afamada cadena Relais & Putains, especializado en desprecintar vástagos adinerados. De allí fue despedida debido a una malhadada operación de apendicitis que la impedía escotarse como antaño. Ahora mismo en esa casa se oyen voces alteradas; se le ha averiado la bacaladera de la Visa; lo sé, porque ha dejado de sonar la sevillana de despedida de los clientes que lleva incorporada el artilugio, y por la imprecación de la lumi: “se jodió la tragaperras”. También hablan de Cristobalito, un charrán con síndrome de Diógenes, tan pestilente, murmuran, que le hizo una rozadura con la uña del pie a un vecino y a punto estuvieron de extirparle el bazo al lesionado; como mal menor le tuvieron que poner la antitetánica. Ahora, está liquidando existencias y tiene cola a la puerta de su casa. Ha colocado un cartel a la entrada con esta leyenda: “los españoles, primero”.
Las paredes son de papel; en otro de los pisos se ha celebrado una sesión espiritista, tal vez para sordomudos. Sin darse cuenta, se han ido sin despedirse convenientemente y han dejado sólo al espíritu quien, al no encontrar respuesta a su presencia, está machacando el suelo a base de golpes con las sillas y movimientos de la mesa, en sincronía con las luces que se encienden y apagan siguiendo el alfabeto Morse. Aquí, se dice, recibe el Gran Joao, quien realiza sus rituales de limpiezas a los espíritus impuros en un programa que denomina “La noche de las algas monocromáticas”, un acontecimiento que según publicita, sucede cada 15.000 años. Estoy por pedirle presupuesto para que limpie el patio, que tiene guarrerías de aproximadamente esa edad.
En el bajo hay una academia de baile que, por motivos coyunturales, se dedica ahora a preparar el ingreso en el Colegio de San Ildefonso. Suena, aunque lejano, el sorteo de la Lotería Nacional de 1958: se les habrá olvidado apagar el casette. Lo llevan claro los del primero, el Gordo lo cantan al final.
Cuando empiezo a coger de nuevo el sueño, pared con pared, hablan Caridad y Ginés:
- Ginés, ¿tú conoces a Jesús Eguiguren?
- Me suena, ¿no es el novio de Kylie Minogue?
- No. Es un político vasco
- ¡Ah! ¿y qué le pasa?
- Que abandona la política. Lo mandan al paro
- ¿se ha quedado con el Cupo para él solito? Pobrecico ¡hay tanta necesidad!
- No es por chorizo, es por guarro
- ¿por guarro?
- Sí, era el gerente de una fábrica de mierda y lo echan por goloso
Zzzzzzzzzz……zzzzzzzzzz.zzzzzzzzzzzzzz


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