viernes, 14 de junio de 2013

Mi hijo.

eltumbaollas dijo:
Algunos días me fijo y otros me escondo en la cocina. Me fijé en una morita de las de pañuelo que llevaba a dos niños al cole, ella no me miró pero supo que yo lo hacía, quizá me olió el Boss Bottle que desparramo por mi cuello. Toda la vida hablando del corazón (putos cardiólogos) y nos olvidamos del cuello que es más importante. Mi hijo es más alto que yo pero por el cuello. De hombros sigo siendo, aun, más alto pero como es cuellilargo me saca dos centímetros por la cabeza. Yo soy cuellicorto por la edad y por las cervicales de pega que me gasto. Me tiré años esperando a que fuera más alto que yo y ahora ando depre por lo que ansiaba. El mismo día que nació me prometí cuidarle hasta que fuera más alto que yo. ¿Cómo era aquello? Vive de tus padres hasta que puedas vivir de tu hijo. Me consuela saber que anda más despistado que yo: hoy estudio derecho, hoy me voy a EEUU a ser entrenador de fútbol (soccer) hoy me acarreo un carrera nueva en Mondragón (de las de pagar) hoy me hago cartujo… y así. Mientras no se haga malo a mí me va bien. ¿Y se ha hecho malo? No sabe serlo. Ha compartido conmigo mi viaje a los infiernos y se abrazaba a la Mari diciéndo, implorando, quizá, ¿de esta mierda se sale? La gente no sale, tu padre siempre, solo tienes que esperar. ¿y por qué va? dijo
quizá por que no sabe evitarlo.

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